CURSO
DE FORMACIÓN LAICAL FAMILIA, CULTURA Y VIDA
Temas
tratados
Intervención a cargo de la prof.: Emilia Conde (Uruguay)
Aparecida:
- Un
punto en una línea inconclusa.
- El
camino andado desde Vaticano II.
- La
necesaria pregunta eclesiológica.
- Expectativas
y prejuicios.
Familia
-
Un aporte desde la Teología Pastoral.
- El
problema de la familia, ¿un tema para la teología?
-
Un área disputada.
-
Algunos presupuestos.
-
La sacramentalidad del matrimonio.
-
Matrimonio e Historia de Salvación.
-
Nuevos horizontes. Nuevos problemas.
- ¿Algunas
soluciones?
- El
sacerdocio común de los fieles
- Aparecida:
¿La hora de los laicos
-
Y… ¿qué dicen los laicos?
Intervención
a cargo de la Dra. Ma. Lourdes González Bernardi (Uruguay)
- Desafíos
contemporáneos en bioética: del aborto a la eutanasia
- Inicio
de la vida. Imágenes. Diagnóstico de vitalidad.
- Aborto
en casos límite: La eugenesia
- Aborto.
Métodos Actuales: Misoprostol.
- Métodos
de regulación de la fertilidad-sexualidad.
- La
eutanasia no existe, existe la mala praxis
- Cuidados
paliativos.
Intervención
a cargo del Dr. Pro. Pablo Peralta, Rector de la Facultad de Teología
del Uruguay “Mons. Mariano Soler”
Teología
y Cultura
Reseña de la exposición:
“Trataremos de hacer un aporte, desde el proyecto de Dios para
el hombre, acerca de la cultura como lo específicamente humano.
Dios ha querido al hombre como colaborador en su obra, como socio en la
tarea de realización del mundo y de la vida. Su palabra, buena
nueva evangélica, es realización en el camino de la historia
humana, realización de cultura, creadora de cultura. El cristiano
recibe el don de la vida nueva pascual como llamado a vivir y anunciar
las maravillas del Señor. De allí que la evangelización
de toda la cultura y de todas las manifestaciones de la cultura, sea para
el cristiano desafío ineludible, don y tarea permanentes, como
nos lo ha expresado el Concilio Vaticano II y lo han profundizado las
Conferencias latinoamericanas de obispos.”
Hubo
también momentos de oración, celebración y confraternización
que nos permitió conocer y compartir vivencias con hermanos que
no conocíamos y reencontrarnos con muchos otros con los que habíamos
compartido otras instancias.
También hubo oportunidad de hacerles conocer, a nuestros hermanos
argentinos, nuestra parroquia, colegio y parte de nuestra ciudad.
Y por último la despedida, con el deseo común de transmitir
lo vivido en nuestras comunidades respectivas y la esperanza de volvernos
a encontrar.
|